A lo largo de nuestra vida podemos encontrar numerosas prácticas y deportes tan raras que parece inimaginable que incluso existan. Una de ellas es el car-jitsu, que está arrasando en las redes sociales rusas por su peculiaridad.

Se trata de un deporte de contacto que se practica en el interior de los automóviles. Esa característica aumenta la expectación de quienes lo realizan y lo ven desde hace unos años, cuando fue creado por Vikentiy Mikheev, quien es cinturón negro de jiu-jitsu y otras artes marciales.

El car-jitsu supone un desafío para sus practicantes. Deben incomodar y someter a su oponente en un lugar tan pequeño como el interior de un coche. Para ello pueden aprovecharse de cualquiera de los elementos que componen el vehículo. 

Sus reglas son sencillas, pero la más complicada podría ser que no se permite golpear. El partido consta de dos rondas de tres minutos cada una. Los competidores comienzan en los asientos delanteros y van sumando puntos al ganar posiciones a su oponente. Si finalizan esas dos rondas con empate, pasarán a moverse al asiento trasero para disputar la final, que dura cuatro minutos.

Su propio sistema de puntos se basa en ganar cuatro puntos por cada control de montaje y espalda, y dos por la posición de rodillas sobre el vientre. 

El curioso hallazgo de un usuario en Google Maps: "¡He encontrado un perro con seis patas!"

El creador habla así sobre este nuevo deporte: "En 2020, se me ocurrió la idea de hacer agarre competitivo en vehículos. Desde octubre, mis amigos y yo hemos organizado pequeños torneos de car-jitsu para estudiar los aspectos de la aplicación del jiu-jitsu en un espacio tan reducido".

Aunque parezca un deporte tonto, la realidad es que se está haciendo muy popular en Rusia y fomenta la creatividad. Ahora busca traspasar las fronteras, por lo que es posible que en un futuro llegue a practicarse en nuestro país.